FÚTBOL vs GOLF

Las comparaciones nunca son buenas o al menos eso dicen, pero yo voy a comparar la rutina de un futbolista, con la de un golfista.

Mientras un jugador de fútbol  entrena cuatro o cinco días para jugar un partido, un golfista entrena siete días.

Un jugador de fútbol juega un día o dos por semana, un golfista juega cuatro sí pasa corte, que además le conviene pasarlo.

Un futbolista termina de jugar y se marcha a su hogar a descansar junto a su familia, un golfista se queda en la cancha de prácticas entrenando después de terminar una ronda, bien y sí los futbolistas tuvieran que quedarse entrenando penaltis o aquellos pases que han fallado después de jugar un partido de fútbol?

Un jugador de fútbol antes de comenzar a jugar ya ha cobrado millones por fichar por un equipo, un golfista paga por competir, sí tiene que pagar una inscripción para poder participar en ella, os imagináis que Ronaldo, Messi o cualquier otro tuvieran que pagar cada vez que juegan un partido de fútbol con sus equipos?

Un jugador de golf cobra por su trabajo sí pasa el corte de dos días y siguen con suerte en la competición, un jugador de fútbol ya ha cobrado de antemano, pero además sí gana pueden conseguir primas millonarias, relojes, coches último modelo, que pasaría sí los futbolistas sólo cobrarán cuando ganan el partido? Sí empatasen o perdiesen no cobrarán o le restarán una cantidad de dinero de su contrato millonario?

Un golfista pasa temporadas fuera de casa, lejos de la familia, comparte coche y hotel para minorizar gastos, sí sí un golfista corre con todos los gastos que supone el desplazarse a competir, a desempeñar su trabajo.

Un futbolista juega y vuelve a su casa, sí se desplaza va en autobús o en avión, se aloja en hoteles de lujo y todo sale del bolsillo del club al que pertenece.

Un futbolista llega al aeropuerto o al hotel y tiene a miles de seguidores esperándole para darle la bienvenida, demostrarle todo su apoyo.

A un golfista lo único que le espera es una cinta llena de maletas y minutos de espera y rezos para que no hayan perdido su bolsa de palos, su herramienta de trabajo.

Y ahora bien después de estas comparaciones tan obvias pero que muchos quieren ignorar, de verdad la vida de un golfista profesional es tan

perfecta como muchos quieren seguir haciéndonos creer?

Reflexionen señores, reflexionen.....